Saturday, March 28, 2009

Entonces, baje del 132 con todo el agobio encima. Calor en Buenos Aires, humedad 100 porciento y visibilidad..Nada. Saque de la mochila el paquete de cigarrillos, tratando de mirar al cruzar para que la voragine portenia no me arrastre con sus ruedas apuradas.
Me detuve un segundo a mirar no se que cosa en no se que negocio, pero mantengo el recuerdo vago que era de lamparas. Mire sin querer mirar, observe a tientas como descansaban las lamparas detras de la vidriera ya cerrada.
Espere.
Mire el celular para ver si habia alguna senial.
Siempre fui impuntual. Jamas pude llegar tarde a ningun encuentro. Siempre, y sin proponermelo, cinco o mas, minutos antes.
-Uf..Tendra esto alguna cura, o sera escencia?- pense mientras Cordoba rugia.
Segui fumando, parada en la esquina, en el borde. Autos, gente, autos, gente, quiosco de diarios, locutorio, autos, colectivos, taxis con propagandas, gente, gente, autos, edificios, poco de cielo, nubes, autos.
Que poco me faltaba para dejar de ver todo eso. Para pasar a ser extraniada por la ciudad furiosa, candente, ardiente. La ciudad que ruge, la que llama, la que melancoliza. En ese momento, ni siquiera podia albergar la idea de extraniarla.
El cigarrillo culmino en mis dedos. El ultimo respiro lanzado al eter por mi boca.
Me sente, me pare, escuche mas musica. Me puse los anteojos de sol para ocultarme.
Buscando entre las personas, miro entre la gente, y envuelta en chupines aparece caminando. Me reconoce antes de cruzar, se saca los mp3, me sonrie.
Jamas se lo dije, pero siempre que la veia, casi instintivamente, venia a mi cabeza el recuerdo de la camisa verde que tenia el primer dia que la vi.
Cruza con sandalias negras y las unias de los pies pintadas. Se acerca, saluda y dice>
- Un cafe?-
Y yo pienso>
-Si poderosa amiga, todos los cafes del mundo en tu mesa-

1 comment:

  1. que nitidez en tus palabras y en ese recuerdo, que existen endogamicamente en mi!!

    ay..cruzar la calle con alguien querido mirandonos desde la esquina opuesta es tan lindo y tan peligroso! podria haber muerto cien veces entre la ansiedad y la distraccion!

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